Mis cuentos favoritos. ¿Puede pasarle a cualquiera? Desmontando la culpa gratuita

¿Puede pasarle a cualquiera? Mar Pavón, Sonja Wimmer. Cuentos de luz SL. (Contado por María del Mar Vals, de EntreContes):

Este cuento me sirve de apoyo cuando aparece la culpa, ayudándome a crear responsabilidad y dejar atrás el runrrún interno que más que ayudarme me bloquea.

Las ilustraciones me permiten conectar con mi niña interior y comprenderla mejor; son muy emotivas y tiernas. A través de estas páginas podemos ver algunos momentos de la vida cotidiana de un niño en su familia. Podemos así conectar y reflexionar como personas adultas y también como peques.

En la historia, las necesidades de Balzo, que es el pequeño, no son tenidas en cuenta y se pasan por alto. La mamá y Balzo van a una tienda "no se toca"donde la adulta sí puede explorar y tocar, pero Balzo no. La necesidad de movimiento y exploración queda prohibida durante ese rato.

Podemos hacer nuestras primeras cuestiones:

¿Qué te parece esto?

¿Podría la madre de ese niño darle alguna opción para cubrir sus necesidades durante ese rato?

¿Podría el dependiente de la tienda ofrecer un espacio seguro para que Balzo juegue e indague?

¿Cómo te gusta o te gustaría hacerlo con tus peques?

¿Cómo anda ese peque interior tuyo? ¿Es escuchado y atendido por tu parte adulta?

La mamá tampoco le explica a Balzo que sí puede hacer en la tienda ni le presta atención. Cuando él empieza a jugar por allí y empieza a imaginar mundos mágicos para lidiar con su aburrimiento, empiezan a ocurrir cosas. Así, hasta que hay un accidente y le cae encima un sermón y alguna mirada potente que lo deja fuera de órbita. Tenemos bastante normalizada esta escena y conviene replantearse algunas cosas.

¿Cómo podemos hacer más amable la vida de ls peques de nuestro entorno? ¿Y la de nuestra peque interior?

¿Podemos recurrir a otra estrategias que no añadan culpa y vergüenza a estas situaciones cotidianas?

¿Podemos ver el error como oportunidad de aprendizaje para todas las partes en lugar de buscar culpables? ¿Somos capaces de reconocer esos errores, nombrarlos y tras un tiempo prudencial enfocarnos en soluciones? ¿O quedamos atrapados en el ciclo culpa, vergüenza?

¿Podemos atender nuestras propias emociones desagradables y las de las personas que nos rodean?

Balzo se hace un chichón y siente dolor pero no se le atiende en este sentido. No se validan sus emociones hasta más tarde. Entre las personas adultas sí se escuchan y ayudan a procesar los errores. Para ello el papá emplea la expresión "puede pasarle a cualquiera" ,cuando la mamá rompe un jarrón por accidente.

¿Consideras que ls peques merecen la misma consideración que la adulta del cuento?

A través de esta historia te invito a hacer estas reflexiones sobre la manera de tratarte y tratar a las personas que te rodean. A tratarnos bonito, seamos "grandes" o "peques". Pequeños gestos pueden ir cambiando nuestro mundo interno y externo.

¿Y tú qué eliges? ¿Actuar como las figuritas del cuento? ¿Actuar como la madre y el dependiente?

Hay una culpa que ayuda a remendar errores y hay otra que avergüenza, humilla y sermonea.

¿Puedes observarlo?

En disciplina positiva se propone cambiar los castigos por consecuencias naturales y lógicas. Te invito a indagar sobre esto si te interesa poner en práctica nuevas formas más amables y amorosas al reeducarte y educar a otras personas de tu entorno. Muchas veces nos sentimos mal y es precisamente porque falta mirada hacia esa niña o niño interno. Otras veces, también sentimos que nos faltan recursos para enfrentarnos a la educación y crianza que queremos llevar a cabo. Una cosa suele estar relacionada con otra. Cuanta más conexión y más salud tenga yo, cuanto más atienda mis asuntos pendientes a nivel interno, mejor podré atender a los de fuera y más conexión podré lograr con ellos.

¿Eliges poner comprensión y conexión? ¿Eliges aumentar el rechazo y la desconexión?

Gracias por tu atención, por compartir esta información y practicarla a tu ritmo. También por comentar y aportar tu visión. Recuerda que ahora puedes darte lo que te faltó de peque y también darlo a las personas que te rodean. Podemos equivocarnos y seguiremos haciéndolo. Pero siempre podemos aprender de ello y avanzar hacia un mundo mejor.

Rus.